GRADE presentó y debatió nuevo estudio ¿La cuna marca las oportunidades y el rendimiento educativo? Una mirada al caso peruano
GRADE presentó y puso a discusión su estudio ¿La cuna marca las oportunidades y el rendimiento educativo? Una mirada al caso peruano (Documento de Investigación 66), el 26 de marzo, en el auditorio de GRADE. Los autores de la investigación, Santiago Cueto, Gabriela Guerrero, Juan León, Mayli Zapata y Silvana Freire emplearon la información recogida por el estudio de largo plazo, Niños del Milenio.
El trabajo fue presentado por Cueto y comentado por Verónica Villarán, responsable de la Dirección General de Desarrollo de Instituciones Educativas del Ministerio de Educación, para seguidamente dar pase a la opinión de los participantes sobre los resultados del estudio. Entre el público estuvieron funcionarios públicos, docentes, investigadores y profesionales de ONG y la cooperación internacional.
El documento encontró que en una muestra de escolares de cuarto grado de primaria, los niños que nacieron en familias relativamente pobres, asistieron a escuelas primarias con menor infraestructura y tienen en clase menos Oportunidades de Aprendizaje (ODA) en matemáticas que otros estudiantes de contextos más favorecidos, lo que se asocia con su menor rendimiento en dicha materia. “Entonces la pregunta de si la cuna marca las oportunidades de aprender debe ser contestada de manera afirmativa; así, el sistema educativo peruano actualmente no está contribuyendo a reducir las brechas en rendimiento debido a su naturaleza inequitativa” sostuvo Cueto.
El estudio también halló que si tales estudiantes encuentran docentes que favorecen mayores ODA, su rendimiento se acerca al de estudiantes de hogares de mayor nivel socioeconómico. “Las ODA podrían ser un instrumento para disminuir las diferencias en rendimiento. Lo que ocurre en el salón de clases (…), tiene importancia no solo para el rendimiento, sino para disminuir la inequidad”, indicó Cueto. Para poder medir las ODA, el estudio analizó los cuadernos de los estudiantes mediante la codificación de la cobertura del currículo, el número de ejercicios correctos, la retroalimentación del docente y la demanda cognitiva de los ejercicios resueltos por los alumnos.
Villarán, por su lado, resaltó que Niños del Milenio “nos ha ido dando puentes de estudio y bastante información con la que se podría trabajar. Digo “podría” porque lamentablemente, a pesar de que se han ido diciendo cosas a lo largo del tiempo, estas no se han ido incorporando a las políticas de la educación con la misma celeridad”.
Empero, la representante del Minedu agregó que “el año pasado llevamos a cabo, en los contextos de los chicos con nivel socioeconómico más bajos (…) un acompañamiento en las escuelas”. Luego, recogiendo el espíritu del estudio de GRADE, Villarán se preguntó “¿valdría la pena una intervención piloto para ver hasta dónde está llegando este acompañamiento pedagógico focalizado a las ODA?”
La investigación usó datos de un grupo de niños y niñas en tres momentos de su vida: cuando tenían no más de 18 meses, cuando tuvieron 4 o 5 años, y cuando estaban entre los 11 y 12 años. Además, esa información se complementó con una encuesta escolar que se les hizo a los mismos niños en el año 2011. Haber obtenido la información de los mismos niños en diferentes edades es una particularidad de este estudio que lo hace novedoso. Estudios previos ya demostraron que el rendimiento de los estudiantes peruanos se asociaba estrechamente a su nivel socioeconómico, pero aquellos trabajos fueron transversales (una muestra poblacional, en un solo momento temporal).
Las conclusiones son consistentes con otros estudios de Niños del Milenio: históricamente la educación peruana no ha logrado convertirse en un instrumento para mayor equidad. Este es tal vez, el principal reto que la actual gestión en el Minedu busca combatir a través de diversas políticas públicas.