Preocupación por percepción de los niños hacia programa Juntos
Entre las conclusiones de cuatro estudios presentados por el Grupo de Análisis para el Desarrollo (GRADE) y su estudio de largo plazo Niños del Milenio sobre el impacto del programa Juntos, se señala que la percepción de los niños sobre este programa es menos positiva que la de las madres debido a que dedican más horas a tareas domésticas, sacrificando su periodo para juegos. Y, por otro lado, que Juntos ha contribuido a que la disminución de la desnutrición crónica infantil ha sido más significativa en los niños cuyas madres tenían mayor educación.
La presentación de las cuatro investigaciones, realizada el 29 de enero, estuvo a cargo de los investigadores de GRADE: Miguel Jaramillo, Alan Sánchez, Javier Escobal y Sara Benites, todos ellos autores de los estudios mostrados; y la directora ejecutiva del programa Juntos, Milagros Alvarado. Los estudios fueron los siguientes: “Transferencias y Condiciones: Efectos no previstos del Programa Juntos Boletín nº5 de Políticas Públicas del Estudio Niños del Milenio”; y “Algunos impactos del programa Juntos en el bienestar de los niños: Evidencia basada en el estudio Niños del Milenio Boletín nº7 de Políticas Públicas del Estudio Niños del Milenio”, ambos de Javier Escobal y Sara Benites. Y por otro lado, “Impacto del programa Juntos sobre nutrición temprana”; y, el “Impacto de Juntos sobre salud temprana”, ambos de Miguel Jaramillo y Alan Sánchez.
En sus respectivos estudios, Escobal y Benites revelan impactos de Juntos que no se esperaban, como que los niños dentro de este programa dedican más horas a tareas domésticas que para jugar. El dinero que entrega Juntos a los hogares beneficiados por este programa, se incrementa en un cincuenta por ciento debido a que muchas familias invierten parte del mismo en actividades complementarias, como crianza de animales pequeños o cultivos. Esto implica menos tiempo de las madres con sus hijos, provocando una percepción negativa sobre Juntos por parte de los niños.
“La mejora de ingresos de los padres han intensificado el uso del tiempo de la madres. Ante la ausencia de espacios de cuidado, los niños están siendo cargados con esfuerzos adicionales; se le pide que vaya a la escuela entre otras actividades, siendo presionados por distintos actores y al mismo tiempo atravesando una recomposición del tiempo en el hogar. El niño o niña puede terminar asumiendo tareas adicionales” señaló Javier Escobal.
Al respecto, la directora ejecutiva del programa Juntos, Milagros Alvarado, señaló que “este resultado será analizado porque el programa está interesado en el bienestar de los niños, a los que quieren llegar a través de las madres quienes son las receptoras del dinero que se le entrega a cada familia”. Alvarado agregó que Juntos está en un proceso de reorientación de sus objetivos. “Queremos incorporar a los usuarios en un proceso de mejora”, remarcó.
Los estudios de Sánchez y Jaramillo, por su lado, hallaron que Juntos ha contribuido a reducir la desnutrición crónica entre sus niños beneficiarios menores de cinco años, y que la disminución ha sido más significativa en los niños cuyas madres tenían mayor educación.
“Es cierto que la desnutrición crónica infantil se ha reducido entre los hogares favorecidos por el programa Juntos, pero también es cierto que se ha reducido en todo el país, incluyendo hogares que no pertenecen a este programa. Lo que queremos en este estudio es desligar la idea de que la caída de la desnutrición sea directamente atribuible al programa Juntos”, indicó Alan Sánchez.
Milagros Alvarado señaló que Juntos, con apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), ha establecido una línea de base, de modo que en el año 2014 se tendrán datos -del Perú y otros vecinos de la región- para elaborar indicadores mediante los que se mida y evalúe el impacto del programa en las familias beneficiarias.
