La mayor violencia contra los niños se da en el hogar
Según un estudio sobre violencia contra la infancia realizado por el Grupo de Análisis para el Desarrollo (GRADE), en el Perú la violencia contra los niños se da con mayor frecuencia en el hogar. El 44,2 por ciento de los niños han sido víctimas de violencia en el hogar, 28,3 por ciento en el colegio y 13,3 por ciento por parte de la comunidad. El estudio se realizó con niños y niñas de cero a ocho años provenientes de 903 hogares ubicados en Lima, Huancavelica y Loreto.
“Este estudio se realizó en seis distritos del país: Villa el Salvador y San Juan de Miraflores en Lima, Acoria y Huancavelica en la región Huancavelica, y Punchana y Belén en Loreto. Estudiamos la violencia psicológica y física contra la infancia. Se analizaron tres lugares en donde existe maltrato infantil: el hogar, la escuela y la comunidad. Encontramos que la violencia infantil es más frecuente en el hogar que en otros ámbitos”, explica Martín Benavides, director ejecutivo de GRADE.
El estudio revela que el tipo de violencia física contra los niños más frecuente en el hogar es la violencia moderada: 27,4 por ciento de los niños que formaron parte de este estudio habían sido castigados por medio de sanciones que implica lastimarlos con algún objeto; el 14,7 por ciento ha sido víctima de violencia leve y un 6,4 por ciento de violencia severa, como quemaduras o laceraciones.
“El castigo físico contra los niños es ejercido mayormente por la mujeres, sin embargo, son los hombres los que recurren en mayor proporción a la violencia física severa, la cual es la causante más común de lesiones importantes en los niños”, señala Benavides.
Los resultados del estudio llaman la atención sobre la actitud de los padres frente al castigo físico y su justificación y legitimación. “La proporción de madres que están de acuerdo con el castigo físico varía en función de la situación que se quiere sancionar. Esto sugiere que en muchos casos la violencia infantil dentro del hogar es considerada como un instrumento legitimo de disciplina o castigo. Mientras que en el caso de la violencia ejercida por el profesor hacia los niños existe un grupo significativo de madres que estuvieron de acuerdo con la aplicación de la violencia física contra sus hijos. Los niños mayores son más propensos a ser víctimas de violencia física”, dice Benavides.
El estudio busca entender los factores relacionados a la severidad de la violencia contra los niños, encontrándose que la violencia contra la mujer y las actitudes hacia la violencia contra la mujer están asociadas con la severidad del castigo aplicado a los niños. Los niños cuyas madres han sido víctimas de violencia física por parte de su pareja tienen mayor probabilidad de ser castigados de manera más severa, señala el estudio. Asimismo, los niños cuyas madres están más de acuerdo con las justificaciones hacia la violencia contra la mujer por parte de la pareja, están más expuestos a sufrir castigos físicos severos.
En el caso de la violencia psicológica, el estudio plantea una relación entre ésta y la violencia física hacia la mujer. “Esta relación sugiere que el hecho de que la madre o cuidadora del niño haya sido víctima de violencia física por parte de su pareja, aumenta en 9,5 por ciento la probabilidad que el niño sufra de violencia psicológica”, precisa Martín Benavides, director ejecutivo de GRADE.
El estudio sobre violencia contra la infancia elaborado por GRADE se presentó el viernes 28. Este estudio ha sido financiado por la Fundación Bernard van Leer de Holanda y es la primera entrega de una serie de cuatro estudios vinculados a la problemática del maltrato a la infancia, accidentes de los niños, desnutrición y salud, y programas de atención y educación de la primera infancia.