Potenciales focos de contagio del COVID-19: mercados y supermercados
Los mercados de abasto y supermercados son, y seguirán siendo por un tiempo, los principales puntos de aglomeración en la ciudad. Complementando nuestro análisis de áreas de alta vulnerabilidad ante el virus en Lima, presentamos aquí la identificación georeferenciada de mercados y supermercados que atienden a esta población, así como sugerencias para mejorar la estrategia de control en estos espacios.
En una nota previa, el área de Urbanización y Ciudades Sostenibles de GRADE1 identificó las zonas prioritarias para la prevención y control del contagio del COVID-19 en Lima Metropolitana, es decir, áreas de la ciudad que concentran la mayor cantidad de población vulnerable (mayores de 60 años) viviendo en entornos de alto riesgo de infección (alta densidad y hacinamiento, limitado acceso a agua). El objetivo de este ejercicio es enfocar las intervenciones del Estado y la sociedad en aquellos espacios donde el impacto de las mismas —en particular, proteger a los adultos mayores del contagio— sea mayor.
Zonas prioritarias de prevención y control
A diferencia de lo que ocurre en muchos países del hemisferio norte, donde los adultos mayores suelen vivir separados de sus familias, en Lima el 79% de las personas mayores de 60 años viven con familiares —porcentaje que se eleva a 83% en las zonas prioritarias identificadas2. En este contexto, el aislamiento de estas personas vulnerables al COVID—19 es un reto que implica a toda la familia, en especial a aquellos que deben salir a lugares públicos, sea para abastecerse de alimentos (durante el periodo de aislamiento social obligatorio) o para trabajar (al término de dicho periodo).
En tal sentido, proteger a la población vulnerable implica proteger también a dichos miembros de sus familias —o al menos monitorear su estado de salud, para evitar el contagio en casa. La pregunta es ¿cómo se puede realizar dicha prevención y monitoreo? Una forma directa de hacerlo es concentrando los limitados recursos del Estado en aquellos lugares que son, por su naturaleza, potenciales focos de infección masiva. Y como ha quedado claro en las últimas semanas, los mercados y supermercados son, y seguirán siendo por un tiempo, los principales lugares con aglomeración constante de personas en la ciudad3.
Utilizando datos georreferenciados del Censo Nacional de Mercados de Abastos 2016, y una base geoespacial de supermercados construida por GRADE el 2017, es posible identificar todos los centros de abastos que se ubican al interior de las zonas priorizadas señaladas al inicio de esta nota. Por otro lado, utilizando datos de un estudio reciente de GRADE4, calculamos que el 93% de las personas que adquieren sus alimentos en mercados lo hacen en establecimientos que están a menos de 800 metros de distancia de sus hogares. Por tanto, no solo aquellos mercados que están dentro de las áreas prioritarias son lugares críticos, sino también los que se encuentran ubicados suficientemente cerca a sus ellas.
En el siguiente mapa podemos observar todos los establecimientos en cuestión, clasificados según prioridad5:
- Prioridad 1 (directa): 235 mercados y 4 supermercados ubicados al interior de las zonas prioritarias.
- Prioridad 2 (influencia indirecta): 213 mercados y 15 supermercados ubicados a menos de 400 metros de las zonas prioritarias.
- Prioridad 3 (influencia indirecta): 151 mercados y 26 supermercados ubicados a una distancia de entre 400 y 800 metros de las zonas prioritarias.
Mercados y supermercados en zonas prioritarias de prevención y control
Estos mercados son espacios críticos para la aplicación de aquellas medidas de prevención y control que determinen las autoridades competentes. Entre ellas, podría contarse la desinfección intensiva de las instalaciones y protocolos de distanciamiento social estrictos; el monitoreo obligatorio de temperatura corporal; o incluso la realización de pruebas de diagnóstico rápido, con el fin de identificar y contener oportunamente cualquier foco infeccioso local.
Cabe señalar que los mercados y supermercados no son los únicos focos potenciales de contagio en las zonas estudiadas. Sin embargo, para identificar otros lugares y, crucialmente, las rutas utilizadas por los peatones para acceder a ellos, sería necesario contar con datos de movilidad individual históricos y en tiempo real —datos que existen para la gran mayoría de teléfonos celulares del país, y que podrían ser analizados de manera anonimizada.