Este cortometraje fue producido en el marco del proyecto Luces para Aprender. Muestra las expectativas anticipatorias y el impacto de la llegada de internet a las escuelas de comunidades donde no hay electricidad, con la idea de mostrar la realidad que allí viven y los cambios que la conectividad que el proyecto puede generar.
Los actores son niños con gran pasta actoral, residentes de pueblos cercanos a Cajamarca.
La OEI produjo unas guías, disponibles en este mismo Centro de Recursos, de apoyo a docentes o familias que deseen utilizar el video para contribuir al desarrollo de importantes competencias curriculares tanto para nivel primario como secundario.